viernes, 25 de enero de 2013

Segura.

El tiempo pasa, las experiencias nos van puliendo y las grietas con los ańos se van acentuando. Ella camina con el alma perdida descalza por la playa. El viento acaricia su cara, está sola, no hay nadie allí pero se siente segura. Libre. El olor a sal envuelve su cuerpo y se adhiere a su piel. Quiere buscar su lugar en el mundo, la vida no la ha tratado bien. Huye de lo conocido, busca algo nuevo, una vida nueva, ser otra persona. No basta un simple cambio de aires, quiere dejar atrás su pasado. Terciopelo, joyas, cabiar. Lujo por todas partes acompañado de un champagne francés solitario. No hay nadie allí con el que ella quiera brindar, nada vale la pena y nadie la retiene.

sábado, 8 de diciembre de 2012

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La luz del alba se empieza a colar por las rendijas de la persiana sacándola a la fuerza de su mundo de fantasía. Poco a poco sus ojos se van acostumbrando a la penumbra de su habitación. Las paredes recogen fotografías llenas de recuerdos que ya no significan nada, sobre la mesilla reposa su carmín. Se desliza bajo las sabanas y posa sus pies descalzos sobre la madera, no utiliza zapatillas. Camina aún medio dormida por el largo pasillo hasta la cocina, pone a hacer café y va al baño. Se echa agua fría sobre la cara, se mira al espejo. Negro. El maquillaje del día anterior esparcido por la cara. El mármol está frío y se comienza a escuchar el murmuro del café, sale aprisa del baño. Coge una taza. La cocina tiene un amplio ventanal que da a una terraza con dos sillas y una mesa. Se sienta en una de ellas y enciende un cigarro. Nota como el humo entra en sus pulmones inundándole de una placentera tranquilidad mientras disfruta de su moca. Amanecer. Su ático da a un parque verde teñido de la luz rosada del momento. Solamente el ruido de la urbe empaña el momento, sirenas, coches, obras... Apaga la colilla, mira el reloj, tiene que ir a vestirse.

martes, 20 de noviembre de 2012

Simplemente un día más al azar.

Frustación que se agolpa dentro de mi, en un mísero chasquir de dedos, una situación que eligió este día al azar irrumpe en mi rutina destrozando a su paso toda la estabilidad.
Bendito equilibrio, el cual al igual que la fama, hasta con el más ligero aleteo de mariposa en la distancia es devastado por un feroz tsunami.
Tsunami que en mis ojos se evidencia en estrechos riachuelos los cuales mas abajo se abren paso por mis ahora rojizas mejillas.
Poco a poco mi respiración recobra su rítmo perdido y mis pulsaciones su tranquilidad habitual a pesar de que su generador ha salido herido de combate. Todo vuelve a la normalidad, todo a excepción de mi hogar, dulce hogar, si es que alguien aún se atreve a seguir llamándolo así.

viernes, 2 de noviembre de 2012

Desconocido.

La vida son esos segundos que transcurren entre calada y calada a ritmo de colilla mientras acompañas tu mirada esmeralda susurrándome: acércate.
Lentamente me dispongo hacia tus brazos, a cada paso miles y miles de bichitos alados se instalan en mis entrañas. La distancia entre los dos de un par de pies se me hace eterno. Rozo tu piel y respiro de tu respiración que cada vez se vuelve más entrecortada. Desafiamos las leyes de la química fundiendo nuestros cuerpos desnudos bajo un manto oscuro lleno de pequeñas y lejanas piedras preciosas esparcidas al azar, las cuales poco a poco van desapareciendo al mismo tiempo que este veneno ardiente de mis venas.
Recojo mi ropa desperdigada por el suelo, me abrocho el sujetador azabache y me pongo la camisa translucida del mismo color. Él ya está vestido. Somos dos víctimas de la pasión, dos desconocidos que se despiden con un adiós.

lunes, 29 de octubre de 2012

Inquietudes.

Recuerdo esos años con cierta añoranza, esos en los que mi mayor preocupación era conseguir apagar la luz media hora más tarde o poder dejar la comida que no me gustara. Días y tardes enteras en las que poder respirar sin estar encorsetada con la preocupación que un simple número pueda infundir en mi. Una cifra que puede cambiar el caudal de toda mi vida tanto en dirección al basto océano como en  la de el más pequeño estanquito. Desde luego, hablo desde el punto de vista que mi corta experiencia me permite tener, perfectamente sé que aún todo lo que me queda por vivir de ahora en adelante será de lo más complicado (y memorable) que tenga que afrontar.
No ando en busca de eclipsar las inquietudes de todo aquel que tiene que llegar a fin de mes con una familia que alimentar, pero comprendan que aunque la vida del estudiante siempre es pintada como la más placentera, en realidad para quien la tiene que vivir en el presente es de lo más complicado. Un cóctel   a base de diferentes alcoholes tales como amores que del día a la mañana pasan de ser dulces como la miel a amargos como el café, influencias, sociedad que trata de hacerse hueco intentando pisarte, incomunicación con la familia o falta de cariño. Estos ingredientes mezclados forman una bomba al puro estilo Molotov la cual un día -como sabemos- acabará explotando. Alcohol que corre por nuestras venas envenenándonos poco a poco, ron, ginebra, whisky... todo suma para el que tiene que beberlo trago a trago abrasándose la garganta. Nadie se ha librado de caer así que lo que realmente cuenta es ser capaz de levantarse y seguir adelante. No es más que apoyar un pie, adelantar el otro, apoyarlo y así sucesivamente, la teoría es fácil solo tenemos que extrapolarla a la práctica. 

jueves, 25 de octubre de 2012

Una cuestión de colada:

Hoy es uno de esos días en el que todo cobra un color gris, todo incluido el cielo el cual hoy se ha cubierto con una espesa manta de algodón a juego. Hace frío. Pesimismo por todos lados, donde está ese color!? Donde esta ese aparente rosa clarito que siempre nos ha acompañado desde la ignorancia externa? Mi vida ha salido desteñida de la lavadora! Siempre tiene que haber un individuo descuidado que mezcle la suya sin percatarse de que hay colores que no se pueden mezclar ya que algunos son más delicados. Toda esta disputa se podría evitar fácilmente haciendo dos coladas o eligiendo un programa de lavado distinto, si es que hay otro mejor; pero acaso estas dos soluciones arreglan algo? La respuesta es que a corto plazo sí, pero toda prenda que se precie tiene sus defectillos... una salpicadura irrisoria aquí, un pequeño roto o descosido allá, todas esas cicatrices de combate que hacen que les cojamos cariño. No hay que evitar centrifugados a altas temperaturas, hay que enfrentarse a ellos, levantar la cabeza y elegir el detergente adecuado. No hay más vuelta de hoja, esto es todo lo que hay que hacer si  buscamos mantener nuestro color vivo. Ya sabes, únicamente has de ayudar a que tu rosa clarito y delicado madure convirtiéndose en un rosa oscuro, fucsia o incluso granate. ¿Quieres que tu vida no destiña? Hay tienes mis consejos de lavado.

domingo, 21 de octubre de 2012

Fan de los olores.

Tengo que admitir que una de las primeras cosas en las que me fijo en un chico es su colonia, ¿Que huele bien?pues ya me tiene prácticamente enamoradita y sin hablar de si aún por encima viste bien.

Pero ese no es el tema del que quiero escribir hoy. Hoy toca: aromas a infancia.  Un olor que a mi siempre me recuerda a mi niñez es el de la plastilina,  por mucho que me esforzase en hacer cualquier figurilla al final siempre parecia un churro, sin hablar de cuando intentaba hacerme collares y me quedaba todo el pelo pringado. Otros olores que me recuerdan a esta etapa son el del lápiz recién afilado, la goma de borrar y las ceras de colores, ¿a quién no? Podía pasarme horas y horas enteras sola dibujando en la cocina o en mi habitación, era toda una artista. Me gusta el olor a lluvia y a campo mojado, es extraño pero me hacen sentir libre y soñar mientras que por lo contrario, odio el de la lavanda.
Debo admitir que soy una de esas personas que caminan fijándose en todo detalle (aveces incluso obviando farolas...). Aunque pueda parecer singular, me gusta observar el cielo, sobretodo cuando hay nubes y a la puesta de sol, cuando estas se tiñen de colores rojizos y rosados cual algodón de azúcar, otro de los olores de mi infancia. Me gusta el olor de la casa de mis abuelos y el de los libros antiguos llenos de miles de aventuras algún día escritas por un romántico. Amo el olor a sal de la brisa marina y el de la crema solar. El de la piña, las gominolas, el detergente y el del bizcocho recién salido del horno. Todos tenemos nuestras rarezas, esta es una de las mias.

sábado, 20 de octubre de 2012

Simplemente, nos ocurre a todos.

A todos nos ha pasado alguna vez, conoces una persona un día y intercambias tu número de teléfono. Entonces empiezas ha hablar con esa persona todos los días a todas horas hasta entrar en una rutina la cual se podría describir con una multitud de adjetivos todos ellos positivos. Cada vez esa persona digital te va atrayendo más y más hasta el punto de quedar totalmente encajada en su gravitación, depender el tiempo completo de ese individuo como si de la Luna a la Tierra se tratara. Una noche, ya desde cama después de despedirte, en su contestación te suelta un "te quiero" despistado, el cual a ti sin duda te hace dormir con una sonrisa, y a partir de ahí un buenos días fea, cariño, amore, preciosa, o incluso princesa dependiendo del día, al igual que un buenas noches acompañado de esas ocho letras escritas hay arriba. Poco a poco te empieza a gustar, se convierte en la ilusión de tus días; pero el tiempo pasa y con ello los días de interminables conversaciones las cuales poco a poca van cayendo en la monotonía. Te mueres de ganas de quedar con él, verlo en persona, pero las circunstancias hacen que eso sea difícil. El tiempo sigue pasando y un día te dice que va a salir por tu ciudad con amigos comunes, te dice que quiere que salgas también y que te quiere ver, esa noche tú al igual que la ley de Murphy no puedes salir por cualquier motivo inesperado. ¿Qué ocurre a partir de ese día? Esa persona te empieza a atraer cada vez menos y menos, hasta que empiezas a ver sus "Te quiero"s insípidos, ya no significan nada para ti, y realmente te parece incómodo responderle con un "y yo:)", por lo que poco a poco vas haciendo que las conversaciones antes infinitas se vallan degradando a la típica del estilo "-Hola-Hola-Qué tal?", hasta un día perder el contacto completamente. Suele pasar.

viernes, 12 de octubre de 2012

Vuela.

Sábado tarde, espero a que en mi móvil se encienda la lucecita roja parpadeante y empiece a sonar Champagne Supernova de Oasis. Tardes de aburrimiento sola en casa que te hacen reflexionar sobre absolutamente todo el contexto de tu vida. Rectifico, estas tardes de desconexión al final acaban siendo de todo menos aburridas, música a todo volumen y en ropa interior cuando no toca probar la de todo armario (incluido ajenos) y combinaciones extravagantes de maquillaje. Fotos haciendo el estúpido y bailar descalza por toda la casa, sentirte en la cima del mundo. Saltar, girar, simplemente desahogarte de todo, problemas, injusticias, odios, gentuza... Ser tu misma por una vez, reflexionar sobre sueños de futuro y posibles caminos para llegar a ellos. Salir a correr y ver como pisada a pisada todo pierde importancia, notar como el aire acaricia tu cara y te peina el pelo. Correr aún más rápido, sentirte libre... y entonces escuchas:
How many special people change?
How many lives are living strange?
Where were you while we were getting high?
Slowly walking down the hall
Faster than a cannonball
Where were you while we were getting high?
Someday you will find me
Caught beneath the landslide
In a champagne supernova in the sky
Vuelve la frustación, la apatía y todos los demás pensamientos por detrás, estos se acumulan y llenan tu mente de nuevo impidiéndote volar.

EUFORIA

Se suele decir que nuestra memoria tiene capacidad selectiva, ya que las penurias tienden a olvidarse mientras que los buenos momentos y mejores épocas son las que al final llenan nuestros recuerdos. Sin duda, la aspiración de toda persona es alcanzar unos objetivos determinados, en mi opinión, una serie de obstáculos en una carrera cuya meta es la vida que cada uno más ansía. Estos obstáculos no se ciñen solamente al mundo profesional, sino que abarcan también el ámbito personal, pero sea el campo que fuere, los dos conllevan un gran esfuerzo y dedicación; valores los cuales normalmente traen el éxito a sus espaldas.
Un sentimiento que suele ir bastante ligado a nuestros propósitos archivados es la satisfacción personal, la cual nunca desaparece. Pero, ¿se acuerdan del instante justo en el que consiguieron ese preciado bien o ansiado logro que llevaban tanto tiempo esperando? Ese sentimiento es muy distinto a la satisfacción, más bien se podría describir como una inundación de felicidad pura y repentina inigualada; en este caso es la conocida euforia es la protagonista.
La euforia se podría describir también como la exaltación de la alegría con ciertos matices. La alegría es contagiosa, además de espontánea y muchas veces sin causa; en cambio la euforia muy llevada al extremo puede llegar a un punto incómodo y puede suceder que tras esta fuerte emoción ocurra el proceso contrario, es decir, frustración y depresión. Volviendo a la sensación de euforia, ésta puede manifestarse mediante determinados síntomas: bichitos alados en el estomago, optimismo, risa floja… los cuales se pueden resumir en nerviosismo, o al menos esta es la manera mediante la cual se manifiesta en muchas personas. Éste sin lugar a duda es el mismo nerviosismo que experimenta una persona en un concierto de su grupo favorito entre las masas vibrantes de gente, o un niño el día anterior a Nochebuena o en el día de su cumpleaños.
Esta emoción aparte de estar desencadenada por un suceso importante para nosotros, como está explicado en los párrafos anteriores, también puede ser descrita como el sentimiento de bienestar debido a poseer una perfecta salud o debido a la administración de drogas. Un claro ejemplo de este último desencadenante es el falso sentimiento de felicidad producido por sustancias como el alcohol, el cual puede provocar a la mínima circunstancia contraproducente un sentimiento fuertemente depresivo. Este sentimiento depresivo y pesimista no ocurre solamente tras las alteraciones producidas por diversas drogas, sino que también puede ser producto de inestabilidades mentales de ciertas personas que sufren trastornos de bipolaridad a los cuales se les apoda como maniacos. Estos sufren ciertos ciclos efusivo-depresivos, lo que significa que en un determinado momento uno de estos enfermos de bipolaridad puede sentirse lleno de júbilo, o quizás simplemente estar de buen humor, y al segundo sin ningún motivo aparente cambiar totalmente su estado de ánimo pudiendo llegar a la ira o cólera.
El proverbio inglés “Every cloud has a silver lining” (toda nube tiene un delineado plata) significa que toda situación problemática tiene un lado bueno; este mismo proverbio por otro lado también se podría encuadrar desde la perspectiva contraria, todo hecho o situación positiva tiene alguna adversidad, o yendo más allá, que todo lo bueno tiene que estar en su justa media. Un ejemplo para esta segunda afirmación se podría basar una sustancia tan vitalmente necesaria e imprescindible como es el oxigeno, sin él nos asfixiaríamos, pero a su vez poco a poco nos va oxidando por dentro. Con este ejemplo queda demostrado que la alegría es más que saludable, pero que si llega al paroxismo puede ser perniciosa: euforia.